lunes, 14 de octubre de 2019

LOS CAHORROS DEL RIO MONACHIL Y RUTA DE LOS MIRADORES (MONACHIL-GRANADA) (09 OCT 2019)

Monachil es un pequeño pueblo en las cercanías de Granada y que es conocido por albergar en su término municipal la Estación de Esquí de Sierra Nevada, donde se ubican dos de los tres picos más altos de la Península Ibérica, pero también oculta un gran secreto no demasiado conocido por la mayoría de los españoles, se tratan de Los Cahorros. Se llaman Cahorros a un estrecho desfiladero nacido del efecto conjunto de la erosión del río y la confluencia de varias fallas geológicas que lo canalizan. La principal atracción del recorrido de Los Cahorros, además del espectacular entorno en el que se ubica, es que deberemos pasar por cinco puentes colgantes, uno de ellos de más de 60 metros de longitud y a quince metros de altura, sin olvidar el tránsito por la llamada Cueva de las Palomas, que más que cueva se trata de un túnel natural provocado por el desprendimiento de grandes rocas que debido a sus tamaños quedaron encajadas entre las paredes de la estrecha garganta.

El sendero oficial tiene varias alternativas y esta es una de ellas, todas tienen en común el tramo conocido como Cahorros Bajos pero en nuestro caso iniciamos por el Sendero del Río y haremos el regreso por el Sendero de los Miradores, un recorrido paralelo al desfiladero pero por su zona más alta, lo que nos permitirá unas vistas inigualables de toda la garganta y zonas aledañas al río Monachil, la Vega de Granada y Sierra Nevada. Sin dudas, este es uno de los senderos más bonitos que podemos hacer en Andalucía.

Aunque seguro lo sabéis, recordad que cuando se camina entre altas paredes, bloques de casas o piedras, desfiladeros, gargantas, etc... el gps sufre pérdidas contínuas de señal, lo que se traduce en un track errático que puede inducir al equívoco, no obstante, en el paso por la estrecha garganta no es posible ninguna equivocación, solo existe un posible camino y está perfectamente marcado.

Dejamos el coche en: 37°07.851'N - 3°32.174'W
Distancia: 8,45 kilómetros.
Tiempo: 4 horas 37 minutos.
Dificultad: Moderado.

Es habitual que en los pueblos de montaña más visitados, el aparcamiento pueda ser un problema, este no es el caso, en Monachil es fácil aparcar y dispone de un gran aparcamiento público justo al inicio del sendero, por lo es el lugar más cómodo de dejar el coche, en nuestro caso lo dejamos en el Paseo del Rio, en las inmediaciones del restaurante El Rincón de Diego, un lugar con estrella Michelín y que pondrá la guinda al pastel de nuestro recorrido.
Monachil está dividido en tres núcleos de población: Monachil pueblo, el Barrio Alto y Pradollano, nosotros hacemos la salida desde el Paseo del Río en el Barrio Alto de Monachil.

Cruzamos el rio por el puente de la calle Huenes y nos incorporamos al Camino de Hoya Santa. A la derecha del cauce vemos una acequia que nos acompañará durante gran parte del trayecto. WP PUENTE.

Pasados unos metros encontramos un cartel que nos indica un desvío a la izquierda.

Y unas escaleras que nos acerca al cauce del rio.

Y empieza un exuberante y fresco camino donde el rumor del agua toma total protagonismo. Entre los arbustos destacan los álamos y veremos un extenso muestrario de plantas de ribera, como mimbres, juncos y espartos y zarzas, muchas zarzas.

Con grandes porciones de bosque galería,formados por olivos, granados, higueras y otros frutales.

El río Monachil nace en el Barranco de Cauchiles en el pico del Veleta y tiene una longitud de 26 kilómetros hasta su desembocadura en el río Genil.

Y la acequia a nuestra derecha, se trata de la Acequia del Genital.

Acabamos de empezar y no hemos llegado a la parte más bonita pero es imposible no recrearse en las imágenes.

Desde que empezamos vamos caminando dejando el cauce del rio a nuestra izquierda.

Pronto llegamos a la antigua Central Hidroeeléctrica de la Trola. Esta central estuvo en funcionamiento hasta la década de los sesenta cuando  un corrimiento de tierras, provocado por unas intensas lluvias la dañó irremisiblemente, provocando su cierre. WP CENTRAL ELEC LA TROLA.

El sendero está muy bien preparado, y aunque no se aprecie, vamos en contínuo ascenso. WP ESCALERA.

No a demasiada distancia de la anterior, encontramos otra central, se trata de la Central Eléctrica de Tranvías. WP CENTRAL ELEC TRANVIAS.

Fue inaugurada en 1907 y también estuvo en funcionamiento hasta los años sesenta y suministraba electricidad al tranvía de Sierra Nevada. Tras ser adquirida por el Ayuntamiento de Monachil, fue restaurada e inaugurada en 1991. Esta central toma aguas del rio Monachil a través de un canal de dos kilómetros que transcurre, mayoritamiente, por un túnel excavado en la montaña. El agua alimenta una turbina encargada de producir una potencia eléctrica de 2.400 kv.

En la parte trasera encontramos una explanada con bancos y dos fuentes.

WP FUENTE.

Y llegamos al primer puente colgante, que a pesar de esos huecos existentes en su entarimado, transmite total seguridad ¿o no? WP PUENTE1.

Pasado el primer puente vemos una de las altas paredes entre las que se incrusta el río. Por allí arriba está el Mirador de la Era de los Renegrales por el que pasaremos a la vuelta.

Una nueva escalera nos eleva varios metros más. WP ESCALERA2.

Y nos sorprende una gran cascada. WP CASCADA.

Y nuevamente conectamos con la Acequia del Genital. WP ACEQUIA GENITAL.

Y la cascada vista desde otro ángulo.

A nuestro frente vemos el paso estrecho que será el punto álgido de este sendero, el desfiladero de Los Cahorros.


Y llegamos al segundo puente colgante que también tiene su toque de fragilidad. WP PUENTE2.

Tras él, iniciamos una bajada que nos introduce en lo más agreste del camino.

Justo en todo lo alto de esa pared se encuentra el Mirador del Cerrillo.

Al centro de la imagen, el tercer puente. Esto cada vez se parece más al Amazonas.

Aunque no lo parezca, se respira seguridad por todos los lados, numerosos pasamanos aseguran los tramos más expuestos.

El tercer puente es algo más cortito. WP PUENTE3.

Pero nos depara una de las mejores vistas.

En las cercanías del cuarto puente, un cartel nos recuerda algunas medidas de seguridad y la prohibición de coincidir en él, más de cuatro personas al mismo tiempo.

Y aquí lo tenemos, 63 metros de sabroso puente colgante a unos quince metros de altura del suelo. WP PUENTE4.

Este puente también es conocido como Puente de las Chorreras.


Pero antes de cruzarlo, algo me llama la atención, una doble cascada bajo él, y una veredilla que permite la bajada, así que vamos para allá.

Este es un magnífico lugar para el avituallamiento y por supuesto, para un refrescante baño, que aunque estamos en octubre, nos puede saber a gloria. Este es un gran lugar para un baño y el refrigerio. WP BAJACASCADA.

Desde abajo, el puente parece aún más frágil si cabe. Es el puente más antiguo, el original se construyó hace casi cien años, afortunadamente para nosotros y todos vosotros, hoy día está reformado, habiendose sustituido las cuerdas originales por gruesos cables de acero mucho más resistentes y seguros.

Ya no hay vuelta atrás, hemos entrado de forma inequívoca en el paso más estrecho del desfiladero. WP INICIO CAHORROS.

Un estrecho camino que discurre entre las paredes verticales de Los Hundideros y un murete de canalización del agua.

El paso se aferra a las paredes irregulares del cañón lo que nos obligará a adoptar diferentes "poses" para ir progresando.

Apenas unos metros separan ambas paredes cuándo llegamos a la conocida como Cueva de las Palomas, aunque llamarlo túnel sería mucho más apropiado. WP TÚNEL PALOMAS.

Más de cerca podemos apreciar que es un túnel formado por la naturaleza, su techo son grandes bloques pétreos que en su caída quedaron encajados entre las estrechas paredes sin llegar a taponar el cauce del río. En algunas zonas en las que el relieve de la pared dificultan el paso, existen agarres metálicos que nos facilitan el tránsito.

Podemos apreciar el tamaño del pedrusco que nos abre paso al túnel, realmente inmenso.


Pasada la Cueva de las Palomas, la separación entre paredes es aún más estrecha, cinco metros a lo sumo y numerosas palomas que por allí anidan, vuelan asustadas a nuestro paso. Ya sabemos porqué se llama así.

Nuevos salientes rocosos ponen a prueba nuestra capacidad de contorsionistas.

Aunque en la mayor parte de los tramos, el paso es muy cómodo.

La garganta empieza a ensancharse un poco pero ahora el espacio es ocupado por una salvaje vegetación.

Aquí vemos algunos de los agarres existentes que nos permiten salvar este paso con comodidad.

Ahí enfrente el saliente rocoso engulle el paso.

Curiosamente el lugar más incómodo de pasar, carece de agarres y cada uno pasa como puede. Mi compañera de caminos dice que sentada es mejor.

Aunque termina serpenteando cual vil sabandija. Yo he preferido descolgarme del escalón y pasar tranquilamente andando por la zona baja.

Hemos salido de la parte más estrecha del desfiladero y volvemos a tener vistas largas, a nuestro frente el Tajo de las Palomas.

En las cercanías de la Fuente de las Azuelas, encontramos el quinto y último puente. WP PUENTE5.

Es el más pequeñito de todos, pero no veas como se mueve, además hay que tener cuidado por los numerosos alambres puntiagudos que tiene en las zonas de apoyo de las manos, así que es mejor pasar sin agarrarse, lo que unido al vaivén constante y relativo mal estado de las maderas, nos dará un toque emociónal suplementario.

Justo pasado el puente debemos efectuar una fuerte subida por la ladera del Tajo de las Palomas que nos llevará hasta el lugar donde nos incorporaremos a la ruta de Los Miradores. Debemos remontarnos unos cincuenta metros por una pared que en algunos tramos alcanza el 70% de desnivel, pero a "cuatro patas" es fácil superarlo, está muy escalonado y aparenta ser más difícil de lo que realmente es, aunque mejor no mirar hacia abajo. Si tienes vértigos no sería buena idea venir por aquí.

Prueba superada. WP INCORP SENDERO MIRADORES.

Podríamos seguir el camino existente antes de cruzar este último puente y llegaríamos a la Central Eléctrica de la Vega, a nuestra derecha el Tajo del Lunes por dónde discurre la vereda que deberíamos tomar y al fondo, el Peñon del Negro.

Ya estamos en la desarbolada parte alta, por aquí pasaremos calor, pero por contra, disfrutaremos de unas vistas inmejorables sobre todo el desfiladero del Monachil.

Abajo vemos unas hormiguillas que también disfrutan del camino. En amarillo un grupo por el tramo que nosotros hace poco hemos pasado. Algo más elevados y marcados en rosa, otro grupo que se dirige de vuelta por los Cahorros Altos. Los Cahorros Altos tienen el inconveniente de que además, de ir más bajos que la ruta que nosotros llevamos, pues repite la mayor parte del camino, aunque también tiene su encanto, es otra alternativa.

Este paso nos introduce en la zona de Los Hundideros. WP PASO.

Metiendo zoom vemos a un grupo que sale del túnel. Sin zoom resultan inapreciables.

Aunque hemos marcado algunos miradores, realmente todo el camino es un mirador contínuo. Marcado en rojo, la continuación del camino, por encima las Hazas Llanas, un saliente rocoso donde se encuentra el Mirador de las Hazas Llanas y justo por encima, parte de la Vega de Granada, a nuestro frente el Cortijo del Cerrillo. Separando los dos montes, el Barranco de las Revueltillas.

Una vista del barranco y nuestra ruta. Por la pista también se llega a Monachil pero nosotros nos limitaremos a cruzarla para ir acercándonos al Cerrillo.

En la parte baja del barranco encontramos un poste indicativos de las posibles opciones, en ninguna de las cuales se encuentra nuestra ruta. WP BARRANCO REVUELTILLAS.

Las sombras dibujan una cabeza de alce o reno.

Y la zona sombría por donde discurre el desfiladero.

Desde aquí, el lugar por donde vinimos parece una simple arruga del terreno.


Y llegamos al Mirador de las Hazas Llanas. WP MIRADOR HAZAS.

Los tajos de las Palomas y del Lunes y el Peñón del Negro, el Contadero o el Cerro del Sanatorio ya quedan lejos.

Y nuevamente la grieta por donde unos cien metros más abajo, hemos venido.

A nuestras espaldas queda el Cortijo del Cerrillo de la Fuente.

Nos deleitamos con el entorno, a lo lejos vemos una línea de árboles que marcan el lugar por donde discurre la Acequia de los Hábices. Se tratan de álamos blancos (Populus alba), probablemente plantados para dar sustentación a la canalización de aguas. Esta acequia aporta aguas a toda la Solana.


En el centro de la imagen vemos la Vega del Monachil.

Una mirada atrás y a media ladera, vemos la senda recién pasada.

Hacia el noroeste podemos ver toda la Vega de Granada, La Zubía, Cájar, Armilla, y más a la derecha, Granada.

Nos desviamos del sendero para acercarnos al Mirador del Cerrillo, un pequeño cresteo nos lleva hasta él. Las vistas son las mismas, así que no repito fotos. WP MIRADOR CERRILLO.

Nuevamente a media ladera, la veredilla por la que hemos llegado.

Regresados al sendero y a unos quinientos metros llegamos al Mirador de las Eras de los Renegrales. Allí vemos dos eras y la superior es donde se ubica el mirador oficial. Hay que bajar, sí o sí, por allí continúa el camino. WP MIRADOR ERAS.

Desde este mirador podemos ver por donde discurre la parte más bonita de la ruta de Los Cahorros Altos y cuyo camino hemos llevado paralelos un centenar de metros más abajo.

Tras este mirador y habiendo pasado un notable desnivel descendente, llegamos a las Hazas del Río, lugar donde predominan los olivos y a partir de este cartel, todo se vuelve más llano. Cerca de aquí está la Era de Portachuelos, un lugar ideal para la salida hacia Los Cahorros, para los que no quieran andar mucho.

Tras pasar esta fuente tomamos la calle Madre Trinidad Carreras y fin de nuestro camino. WP FUENTE.

Para terminar, aquí os dejo un video de la salida.

Podéis descargaros el track, clicando en la siguiente imagen:
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/cahorros-del-rio-monachil-y-ruta-de-los-miradores-09oct2019-42283863
 
Y ya sabéis, búscanos donde haya un sendero, una montaña, un árbol, donde un humilde musgo espere paciente el deshielo, búscanos donde el buitre leonado se siente invencible o donde la pequeña Langeii desparrame su perfume, búscanos y si nos encuentras, será un placer saludaros.

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