El Chorreón de las Naranjas son un par de saltos de agua provocados por
el arroyo de la Zapata a su paso por la Loma de la Cueva en Jimena de la
Frontera y justo antes de su desembocadura en el río Guadarranque. Es
uno de los senderos más bonitos de todo el parque natural de Los
Alcornocales.
El sendero se compone de dos partes perfectamente diferenciadas, la
primera que discurre desde el inicio hasta el final de la Loma de la
Cueva por el conocido como camino de la Garganta Honda y de fácil realización, la segunda es la bajada a las cascadas y
posterior circulación paralelos al cauce del rio Guadarranque y vuelta
hasta dicho camino por el que también regresaremos, este paso es de
dificultad moderada, la falta de vereda clara y la espesa vegetación con
numerosas zarzas tienen un punto de dificultad poco reconocida por la
mayoría. No es un sendero apto para todos los públicos.
Dejamos el coche en: 36º24.936'N - 5º30.868'W.
Distancia: 12,07 kilómetros.
Dificultad: Moderada.
Tiempo: 7 horas 20 minutos (incluye un generoso tiempo en los saltos de agua).
Para acceder a lugar de aparcamiento debemos llegar a Jimena de la Frontera y allí tomar la dirección de la Pasada de Alcalá que comienza justo pasado el puente sobre el río Hozgarganta y tomar una carretera asfaltada de unos doce kilómetros de longitud en muy buen estado pero estrecha que nos lleva a las Lomas de Cámara. En algunos gps no actualizados correctamente este camino sigue figurando como de tierra por lo que falsearán los tiempos de llegada al lugar.
Lo primero que encontraremos es una cancela con candado lo que nos obligará a saltar por el murete lateral. Tendrá sobre un metro treinta de altura por lo que deberemos buscar apoyos a modo de escalones. Sin problemas para personas con una forma física normal. Una parte del camino discurre por una finca privada pero con servidumbre de paso por lo que podemos saltar con total tranquilidad, no nos estamos colando en ningún sitio.
La sensación térmica es de un "frío que pela", la baja temperatura, la niebla y finas gotas de agua en el aire y el viento, nos dan un ambiente invernal que se agradece, ya va siendo hora de que empiece el invierno. La vista no alcanza más allá de la torre de vigilancia de una de las lomas de Cámara.
Los primeros cuatro kilómetros y medio son por una pista en muy buen estado, salvo una parte que con lluvias se embarra demasiado, pero hoy no es el caso. La espesa niebla y su correr con el viento dan un aspecto onírico al paisaje, pero nos impide ver más allá.
Una vez pasados los primeros kilómetros dónde apenas hay árboles, entramos un viejo pinar de Pinus uncinata o pino negro, aunque más adelante también veremos halepensis y algún piñonero.
A nuestra izquierda la Garganta Honda hace honor a su nombre, y a lo lejos.... a lo lejos no se ve nada, aunque al frente debe estar la Sierra de Murta (visitada en febrero de 2015) en otro memorable recorrido y algo más a la izquierda la finca de La Almoraima (visitada en enero de 2016).
Con dificultad podemos ver la continuación de nuestro camino que en esos momentos discurre por la Loma de Erizallano.
Por ahí abajo discurre el arroyo de la Garganta Honda.
Nos encontramos con la primera angarilla del día. WP ANGA. Recordad que hay que dejarla tal la encontremos, si abierta abierta, si cerrada pues cerrada.
Esta afloración pétrea nos recuerda a un caraimán, como seguro que no sabéis que es, os cuento que se trata de un híbrido entre caracol y caimán. WP AFLORACIÓN PÉTREA.
También podremos ver imnumerables setas y hongos, aquí una bonita y al mismo tiempo tóxica Amanita muscaria aún juvenil.
El camino acaba en la Loma de la Cueva, desde lejos se ve bien el círculo "broche final de la pista", a partir de ahí campo a través por veredillas de cabra, aunque si nos fijamos podremos ver que la ruta está bien marcada por numerosos hitos dejados por gente que pasó antes.
Este tramo es el de peor estado de la pista, las marcas en el suelo nos indican que con lluvias es un auténtico barrizal, nosotros tenemos suerte aunque esto tendrá una contrapartida, al haber llovido poco el caudal de las cascadas debe ser mínimo, esperemos que al menos haya algo de agua.
Nos acercamos al cortijo de Las Naranjas, tres fuentes/albercas y una construcción en ruina nos lo indican.
Al frente el Cerro del Lentisco y abajo la garganta del arroyo de la Zapata.
La casa de las Naranjas queda a nuestra derecha en la loma de la Cueva, domina las gargantas de los Aserradores y la de Zapata.
A partir de aquí entraremos en un precioso alcornocal con algunos ejemplares bien entraditos en años.
Una nueva angarilla nos da paso al tramo final de la pista. WP ANG2.
Este tramo que llevamos recorrido será la parte común en la ida y la vuelta. En negro por dónde seguiremos, marcado en rojo el lugar por dónde deberíamos salir si todo va según lo previsto.
Ya hemos llegado al círculo final de pista, a partir de aquí iremos bajando por nuestra derecha, existen varias veredas y todas llevan al mismo lugar, la del track es una de ellas.
En un momento dado tendremos a la vista una afloración rocosa, vemos como dos cuevas, la de la izquierda es una sombra pero el hueco más pequeño a su derecha es la parte alta de la primera cascada, con un poco de atención se puede oir el caer del agua, hacia allí vamos.
El guardián del camino sólo deja pasar a la buena gente, si pasáis cerca y no os muerde es que sois bienvenidos a este recóndito y maravilloso lugar y además lleváis buena senda.
Aunque no se aprecia bien, en ese lugar que indico existe una angarilla, debemos pasar por ella.
Aún llevando poca agua el sitio impresiona, es increible la fuerza de la erosión y como ha esculpido esas dos chimeneas. El hueco grande es un depósito por dónde cae el agua a la poza al rebosar. WP PARTE ALTA CASCADA 1.
La poza vista desde arriba.
Ya estamos abajo, más bonito aún si cabe.
Por esta canalización circula el agua hacia la siguiente cascada.
Esta segunda poza está más baja, aunque por la configuración del terreno los saltos sean más pequeños.
En épocas de lluvias es fácil ver tres saltos, incluso alguno más si son intensas.
El tiempo ha volado mientras hemos estado aquí pero debemos irnos de este paradisíaco lugar si no queremos que la oscuridad se nos eche encima. El arroyo de la Zapata dona sus aguas al rio Guadarranque que ahora es el que seguiremos.
Este tramo paralelo y muy cercano al cauce es lo más complicado de todo el recorrido, sin vereda clara y con contínuos zig zags sorteando obstáculos, adelfas, ramajes varios y zarzas que ralentizarán mucho el paso.
Venimos de esa dirección y en sentido ascendente, el separarnos del cauce hace que el camino se aclare bastante.
Volvemos a estar cerca de la alambrada, los hitos siguen siendo frecuentes.
Otra vez cerca del cauce. Esto nos permite volver a disfrutar de las aguas que por aquí fluyen tranquilas.
Con más agua este paso sería dificultoso, al ser el caudal bastante corto es fácil rodear esa piedra de la derecha que cierra cualquier posible paso.
Otra vez empezamos a elevarnos, pero esta será de forma definitiva.
Sorprendemos a un grupo de gamos (creo) que pastaban tranquilamente hasta nuestra llegada.
El camino está más despejado pero la inclinación del terreno y la multitud de piedras sueltas no nos permiten aumentar la cadencia de paso.
Por fin llegamos a la angarilla que pondrá fin al tramo del cauce, seguiremos subiendo pero ahora con una senda más cómoda. WP ANG4.
Nos sorprende este cartel, miramos por los alrededores y sólo vemos varios capazos rotos y unas treinta o cuarenta latas vacías de conservas, de esas de dos kilos. ¿? Lo mismo se trata de un estudio de la degradación de la hojalata en el alcornocal.
Estamos dando el último arreón, nos acercamos a la cómoda pero aburrida pista.
Bueno, lo difícil ya pasó.
Con el cielo más despejado podemos ver Gibraltar, San Roque y La Línea.
Allí a lo lejos el Pico del Montero.
El Hacho de Gaucín.
Sierra Bermeja, sierra Crestellina y Casares.
Los últimos rayos de sol nos permiten una toma para el recuerdo, abajo Jimena y su castillo, a su derecha Los Ángeles y de nuevo al fondo Sierra Bermeja, Crestellina y Casares.
Y con esta última foto nos despedimos de este tan maravilloso como desconocido lugar.
Y ya sabéis, búscanos donde haya un sendero, una
montaña, un árbol,
donde un humilde musgo espere paciente el deshielo, búscanos donde el
buitre
leonado se siente invencible o donde la pequeña Langeii desparrame su
perfume, búscanos y si nos encuentras, será un placer saludaros.
Preciosa ruta.
ResponderEliminarMe gustaria hacerla pero no me queda claro hasta donde podemos llegar con el coche.
Los 12 km. afaltados son a pie o en coche.?
Un saludo.
Perdona la tardanza en contestar, hasta hoy no había visto el comentario. Esos doce kilómetros son en coche.
ResponderEliminarSaludos.
Y cuantos km son andando?
ResponderEliminarLo que pone en el blog, 12 kms.
EliminarHola Jose Luis, quede claro de antemano que somos fans tuyos.
ResponderEliminarProbablemente este próximo martes 6 de diciembre, si el tiempo acompaña, queremos hacer esta ruta, llevamos mucho tiempo queriendo hacerla. Tus indicaciones y explicaciones no dejan lugar a dudas y son muy buenas.
Nos queda una duda, ¿hay que solicitar algun permiso?
Y por cierto, me gusta tu coche....el mio es igual, ja ja ja.
Un saludo.
No hace falta permiso. A pesar de que hay que saltar la valla, el camino es con servidumbre de paso pero discurre por una finca privada por lo que hay que extremar el cuidado, no molestar a los animales que podamos ver y dejar las angarillas tal nos las encontremos. Si algo ya tengo visto es que lo que más molesta a los propietarios son los grupos numerosos, ver a 15 o 20 personas, generalmente más, haciendo gala de una gran curiosidad es algo que pone de los nervios a la mayoría, así como los perros sueltos cuándo hay ganado, ahora, cuándo somos pocos y no se monta ruido, nunca hay problemas, lo sé por experiencia.
ResponderEliminarA disfrutar, que con estas aguas aquello debe estar bien bonito, hay un tramo intermedio que debe estar muy embarrado. Y tener en cuenta que con tantas lluvias, el río debe llevar bastante agua por lo que si seguís mi track, el paso por la vera del río en la parte baja puede ser muy dificultoso incluso imposible (según el caudal) por lo que tendréis que buscar una alternativa a un poco más de altura. Sin dudas y como digo en el blog, esta parte baja fue la más dificultosa para nosotros.
Saludos.
Pues de nuevo gracias por tus consejos, ya te informare de nuestra aventura.
EliminarHola, un saludo.
ResponderEliminarBonito recorrido, sin duda... no lo conocía, y ayer sábado, nos acercamos por Jimena para ver esa cascadita.
Me ha gustado bastante, la verdad. Es muy curiosa la formación de las pozas y el puente de roca. Merece un paseo, desde luego. El camino, además, es muy fácil de seguir y muy cómodo, ya que han puesto muchos hitos. No llevaba track, pero no nos costó trabajo ninguno seguirlo. Es estupendo, y muy corto... da tiempo de sobra a comer luego en Jimena una buena ración de setas... o dos.
Gracias por esta información... yo pondré algo en mi blog, pero no suelo dar tantos datos... no me tomo tantas molestias, la verdad. Un saludo.