Este sendero nos llevará a la cueva de Laja Alta, término municipal de Jimena de la Frontera, a través de la Garganta del Gamero. Una impresionante garganta tan bella como desconocida y que habitualmente los senderistas que se sumergen en ella, la hacen en bajada una vez visitada dicha cueva. Nosotros lo haremos al revés, los caminos que presumimos más difíciles preferimos hacerlo en subida así que estructuramos la visita en este sentido. En primer lugar caminaremos paralelos al río Hozgarganta unos tres kilómetros y medio hasta cruzarnos con la desembocadura del Arroyo del Gamero, progresaremos en subida por la Garganta del Gamero unos cuatro kilómetros y lo vadearemos en varias ocasiones en busca de la mejor ruta, por momentos circularemos por la Cañada Real de Manilva, hasta llegar a la cueva, para cerrar el circular regresando por una cómoda y anodina pista que nos devolverá al punto de partida.
Dejamos el coche en: 36° 27.978'N - 5° 29.430'W
Dificultad: Moderada.
Distancia: 13,83 kilómetros.
Tiempo: 6 horas 52 minutos.
Dificultad: Moderada.
Distancia: 13,83 kilómetros.
Tiempo: 6 horas 52 minutos.
El coche lo dejamos justo al margen de la C-3331 (Carretera de Puerto Galis), en la entrada al Cortijo del Barracón. WP APARCAMIENTO.
Tras un corto trayecto en bajada llegamos al pontón que cruza el río Hozgarganta. WP PONTÓN.
A pesar de la poca agua, sigue siendo de una belleza sin igual.
Una valla cerrada con candado y un cartel de: "Prohibido el paso sin autorización". Es un aviso para vehículos. Nosotros pasaremos por la angarilla de la derecha. WP VALLA 3.
Pronto nos desviaremos a nuestra izquierda. En rojo marcado por dónde regresaremos.
Rápidamente nos encontramos un claro repletito de colmenas. En épocas de producción habrá que pasar con cuidado y no acercarse demasiado, por si las flys, digo bees.
El rumor del agua se acrecienta, estamos cerca del cauce del Hozgarganta, pero ciertamente lo veremos poco, muy poco. El camino es incómodo, multitud de cantos rodados ralentizan el paso.
Los vadeos serán contínuos, multitud de arroyadas estacionales se cruzan a nuestro paso. WP VADEO 5.
Sin dudas, estos primeros kilómetros serán los más incómodos de andar, pensaba en la subida por la Garganta del Gamero, pero a la postre, este primer tramo y contra pronóstico, será el peor.
Por momentos casi nos quedamos sin vereda a la vista. Ojo con las zarzas traicioneras. Como suele ser habitual me llevé para casa alguna herida de guerra.
Ya dije que era un tramo incómodo, zarzas, falta de vereda en algunos tramos, mucha piedra suelta, pues la guinda la pone el barro. A pesar del tiempo sin llover, algunos pasos son auténticos barrizales. Aunque califico el sendero como "Moderado" en época de lluvias sería "Difícil", al menos en esta ocasión todos los vadeos, que son varios, fueron en seco o casi, con lluvias muchos llevarían agua, sobre todo en la parte de la Garganta del Gamero, aunque ya llegaremos a eso.
En nuestro camino se interpone un muro al que alguien le dió un bocado. WP MURO.
Un pequeño descenso nos lleva cerca del río, al menos podremos disfrutar de la vista.
Estamos en el lugar dónde el Arroyo del Gamero desemboca en el Hozgarganta. A pesar de tener agua, es poca y nos permite pasar cómodamente, con algo de lluvias aquí habría que mojarse. Ojo al dato. WP VADEO GAMERO.
Empezamos a subir por la Garganta del Gamero, oye, ¡esto no es tan dificultoso como parecía! La alegría durará poco.
Durará hasta que lleguemos a este descampado. WP BUJEO.
Vamos dejando el arroyo del Gamero a nuestra derecha, pero tendremos que cruzarlo varias veces. Vamos haciendo un zig zag agradable. La poca agua vuelve a facilitarnos el paso.
Algunas pozas nos dicen que este arroyo, de seco, nada de nada.
Sin dudas, esta garganta es de las más bonitas que hemos visto y ya van algunas. Es larga, muy larga, pero sin desperdicio. Nuevo vadeo, volvemos al otro lado. El arroyo del Gamero está alimentado por otros pequeños arroyos y nos surgen dudas si estamos vadeando el arroyo principal o un donante, y éste es uno de ellos. A partir de este momento volvemos a caminar por la Cañada Real de Manilva. WP VADEO GAMERO 2.
Bueno, supongo que llamar a esto "Cañada Real" es una broma del destino. Afortunadamente es un pequeño pero dificultoso tramo que durará poco. Vamos progresando por otra arroyada estacional.
Y otro pequeño vadeo. Viendo las grandes rocas movidas por el agua y la erosión producida, por aquí el agua debe correr de lo lindo en los momentos adecuados.
Volvemos a tener suerte, podemos pasar sin "apenas" mojarnos las suelas.
Estamos ya a media altura y esto nos permite hacer especulaciones de dónde se esconderá la Cueva de Laja Alta.
¿Dije que esto era bonito? Pues mentía, es simplemente espectacular, la garganta más grande que nunca pateamos. Vamos en contínuo ascenso pero ni lo notamos, el disfrute es total y encima bastante más despejada de lo que imaginábamos "a priori".
WP ARBOL CAÍDO. Aquí abandonamos la Cañada Real de Manilva (nuevamente) y nos dirigimos a un nuevo vadeo del Gamero. WP VADEO GAMERO 3.
Hemos visto muchas charcas de aguas ferruginosas, pero el color de ésta es impresionante, casi vino tinto, pero en esta ocasión ese color se debe a la concentración de taninos procedentes de los alcornoques. WP CHARCO.
Un divertido paso sobre piedras.
Otra arroyada estacional. WP VADEO 3. Insisto, esta garganta con más lluvia debe ser impresionante y requerirá de material que impida mojarnos hasta el sobaco.
Hemos empezado un largo tramo dónde se alternarán subidas y bajadas bastante cómodas, demasiado diría yo para estar a la altura que estamos, vamos en busca del último vadeo que haremos del arroyo del Gamero.
Seguimos elucubrando por dónde estará la cueva ¿Será por allí?
La zona de transición continúa.
Bueno, llegamos al último vadeo (que "jartura"), esta garganta no se acaba nunca. WP VADEO GAMERO 4.
Sigo impresionado imaginando la violencia con qué debe circular por aquí el agua.
Tras una subida rompepiernas empezamos a tener vistas largas. Allí cerca, prácticamente al lado, vemos Sierra Bermeja y sus Reales, Sierra Crestillina y Casares.
Y una vista parcial de la garganta por dónde hemos venido. Parece mentira que hayamos andado tanto. Y sin darnos cuenta, ya estamos en la Cueva de Laja Alta.
Esta mal llamada cueva, ya que simplemente es un abrigo, contiene pinturas rupestres de estilo esquemático, antropomorfos, zoomorfos y otras formas no identificadas y pertenece al movimiento conocido como "Arte Sureño".
Imágenes tratadas con saturaciones para obtener mayor detalle. La singularidad del abrigo, situado en la finca de Jateadero, podría ilustrar un elemento crucial de
la cultura occidental: el encuentro de las culturas del interior del Mediterráneo
con un grado de dominio del medio ya considerable y los pueblos de
cultura ibérica del sur de la Península, cuyas riquezas fueron
legendarias incluso para civilizaciones como la griega, en cuya
mitología se alude en no pocas ocasiones a la zona.
Es posible que el desconocido pintor tuviera que bajar al Estrecho de Gibraltar varias veces, posiblemente al puerto de la Carteia prerromana para
poder plasmar con tanta precisión esas naves con mascarones de proa o de
popa, de remos, a velas, o con mezcla de ambos sistemas de propulsión. (Fuente Wikipedia)
Aunque existen otras representaciones, sin lugar a dudas este lugar es importante por la representación de las escenas marinas. Según los últimos estudios, se ha propuesto una antiguedad de 6.000 años (AP). Se trataría por tanto, de las primeras representaciones de barcos a vela
del mundo, pues la más antigua conocida -un petroglifo hallado en
Egipto- es de entre 500 a 700 años más reciente.
Mi compañera de caminos muestra el mismo interés en las pinturas como la primera vez que las vió, la arqueología rupestre es algo que la seduce irresistiblemente.
Ya en nuestra anterior visita, descubrió una pintura antropomorfa, fuera del recinto vallado de la que, al menos nosotros, no teníamos noticias.
Aprovechamos un momento antes de continuar para dar un vistazo al "más allá". Y más allá vemos el Parque Eólico de Casares en Los LLanos (Sierra Utrera) y a la derecha, Sierra Almenara, bajo ellas Jimena y su castillo.
Algo más a la izquierda, Casares, Sierras Crestellina y Bermeja y el Hacho de Gaucín.
Rápidamente nos incorporamos a una pista que nos llevará al Cortijo Altabacar, celosamente custodiado por varios e inofensivos perros sueltos que se acercan a nosotros en busca de alguna caricia, aunque yo diría que lo que querían era comida.
Esta zona ya la conocemos, lo que nos permite tirar unas líneas rectas que nos atajan un gran tramo de pista y nos ahorran algún kilómetro extra. Estos eucaliptos nos indican que nos queda poco.
A lo lejos ya divisamos el Cortijo del Barracón, escoltado por los Cerros de los Alisos y Bujeillo y los Altos del Panerón.
Desde una perspectiva diferente.
Y acabamos como empezamos, cruzando el pontón sobre el río Hozgarganta.
Toda la sierra helada, nosotros llegamos totalmente pertrechados para el frio, el coche nos marcó en la venida -1º, y nos sobró hasta la camiseta, un calor horrible durante todo el sendero y un sol de justicia que influyó muy negativamente en la calidad de las fotos, en cambio, todo lo demás fue positivo, un gran día y una Garganta que siendo una auténtica maravilla, es casi desconocida.
Y ya sabéis, búscanos donde haya un sendero, una
montaña, un árbol,
donde un humilde musgo espere paciente el deshielo, búscanos donde el
buitre
leonado se siente invencible o donde la pequeña Langeii desparrame su
perfume, búscanos y si nos encuentras, será un placer saludaros.
SALUDOS: BUENA RUTA Y BUEN REPORTAJE DE FOTOS BIEN DOCUMENTADA, QUE NOS HACES LLEGAR POR ESOS BELLOS PARAJES QUE VISITAIS.....
ResponderEliminarUna ruta sensacional que merece la pena repetir, y este año también, ¡Ah! y las fotos me gustan. Saludos cordiales
ResponderEliminarJulio, Carlos, muchas gracias por vuestra visita.
ResponderEliminarSaludos.